Los datos económicos de septiembre en Estados Unidos revelan una reducción en el índice de gasto de consumo personal (PCE) básico,
que excluye los precios de los alimentos y la energía. El PCE subyacente pasó del 3,8% al 3,7%, nivel que llama la atención de la Reserva Federal (FED) , el banco central estadounidense, que pretende mantener la inflación en torno al 2% . El gasto personal total aumentó en 175.100 millones de dólares y la tasa de ahorro personal fue del 3,4%.
Aunque las cifras están dentro de las proyecciones, el PCE subyacente está muy por encima del objetivo de inflación de la Reserva Federal . Estos datos podrían indicar presiones inflacionarias más fuertes de lo esperado, lo que plantea interrogantes sobre la política monetaria futura.
Con la próxima reunión de la FED a la vista,